| dc.description.abstract | El objetivo de este proyecto es estudiar la organización de las cooperativas agrícolas españolas como modelo empresarial, generando así un material de consulta para mejorar la comprensión de los movimientos cooperativistas. El cooperativismo moderno se inicia en Inglaterra en 1843 con la "Sociedad de los Justos Pioneros de Rochdale", cooperativa de consumo que surge como reacción de 28 trabajadores industriales a las difíciles condiciones de vida presentes en la época. En una rápida proliferación de los principios cooperativistas por toda Europa, este modelo llega a España en 1855 con la conformación de la cooperativa de consumidores "Económica Palafrugellense". En pocos años aparecen las asociaciones cooperativistas de tipo productivo con la conformación de "La Proletaria" y "La Flor de Mayo'·, respectivamente en Valencia y Cataluña. Acorde a la realidad de cada periodo, distintas leyes fueron regulando el nacimiento y desarrollo cooperativista en España. En la actualidad el concepto de cooperativa está dado por la Ley General 27/1999 del 16 de julio, de cooperativas de España: una sociedad constituida por personas que se asocian, en régimen de libre adhesión y bajo voluntariedad, para la realización de actividades empresariales, encaminadas a satisfacer sus necesidades y aspiraciones económicas y sociales, con estructura y funcionamiento democrático, conforme a los principios formulados por la Alianza Cooperativa Internacional. Esta Ley comprende y define 12 clases de cooperativas: encontrándose cooperativa de trabajo asociado, cooperativa de consumidores y usuarios, cooperativas de vivienda, cooperativas agrarias, entre otras. Además, regula la organización de estas, identificando los siguientes órganos: asamblea general, consejo rector y la intervención. En la práctica la organización de las cooperativas también comprende conceptos como gerencia. secciones y formas de agrupación. Entre las formas de agrupación existentes se encuentran las cooperativas de segundo grado y los grupos cooperativos, dos organizaciones supra-primarias recurrentes en la realidad agrícola española. Para mejorar la comprensión de los movimientos cooperativistas es importante revisar el régimen económico y fiscal de las cooperativas agrícolas, ya que la importancia económica y social del cooperativismo como fórmula que puede contribuir eficazmente a la resolución de importantes problemas justifica la necesidad de contar con reglamentos propios, en todos los ámbitos de la empresa cooperativa. Es importante recalcar que el modelo de empresa cooperativa surge en una economía de mercado para que los asociados tengan, unidos, la capacidad de competir con las grandes empresas. Esta capacidad nace de los principios cooperativos que son la base de la estructura y funcionamiento de este modelo, junto al desarrollo de una estrategia de dirección de recursos humanos enfocada a la capacitación. motivación y captación de éstos. Son los socios que, mediante la Asamblea General, tienen el poder para tomar decisiones y gestionar así, democráticamente, la cooperativa. | |