Evaluation of Composite Reinforcement on the Fracture Resistance of Teeth with Unsupported Cusps

Abstract

Se evaluó la resistencia a la fractura de los premolares maxilares con preparaciones amplias de cavidades Mesio-Ocluso-Distal (MOD) y cúspides sin soporte restauradas por medio de cuatro formas, en comparación con dientes intactos. Treinta y cinco dientes humanos se dividieron en cinco grupos: control (G1 - dientes intactos) y cuatro grupos experimentales preparados con cavidades MOD: con cúspides bucales (B) y linguales (L) reforzadas con resina compuesta (Z-250) y restaurada con amalgama de plata (Permite C) (G2); dientes concúspides B y L reforzadas y unidas con composite (P-60) y restaurado con amalgama de plata (Permite C) (G3); dientes restaurados con composite (Z-250) a través de la técnica incremental (G4), y dientes con cúspides B y L reforzadas y unidas con resina compuesta (P-60) y restauradas con composite (Z-250) mediante la técnica incremental (G5). Después del ciclado térmico (500 ciclos, 5°C a 55°C), la resistencia a la fractura fue probada en una máquina de ensayo universal. El análisis estadístico de los resultados (ANOVA) no reveló diferencias significativas (p> 0,5) entre los grupos (G1 = 157,78 Kgf, G2 = 183,99 Kgf, G3 = 152,53 Kgf, G4 = 182,61 Kgf y G5 = 155,96 Kgf). El análisis visual de los dientes probados mostró un predominio de patrón de falla oblicua. Los cuatro tipos de restauración evaluados proporcionaron resistencia a fractura con valores equivalentes a los dientes intactos con preparaciones MOD, paredes paralelas y cúspides reforzadas con resina compuesta.

Se evaluó la resistencia a la fractura de los premolares maxilares con preparaciones amplias de cavidades Mesio-Ocluso-Distal (MOD) y cúspides sin soporte restauradas por medio de cuatro formas, en comparación con dientes intactos. Treinta y cinco dientes humanos se dividieron en cinco grupos: control (G1 - dientes intactos) y cuatro grupos experimentales preparados con cavidades MOD: con cúspides bucales (B) y linguales (L) reforzadas con resina compuesta (Z-250) y restaurada con amalgama de plata (Permite C) (G2); dientes concúspides B y L reforzadas y unidas con composite (P-60) y restaurado con amalgama de plata (Permite C) (G3); dientes restaurados con composite (Z-250) a través de la técnica incremental (G4), y dientes con cúspides B y L reforzadas y unidas con resina compuesta (P-60) y restauradas con composite (Z-250) mediante la técnica incremental (G5). Después del ciclado térmico (500 ciclos, 5°C a 55°C), la resistencia a la fractura fue probada en una máquina de ensayo universal. El análisis estadístico de los resultados (ANOVA) no reveló diferencias significativas (p> 0,5) entre los grupos (G1 = 157,78 Kgf, G2 = 183,99 Kgf, G3 = 152,53 Kgf, G4 = 182,61 Kgf y G5 = 155,96 Kgf). El análisis visual de los dientes probados mostró un predominio de patrón de falla oblicua. Los cuatro tipos de restauración evaluados proporcionaron resistencia a fractura con valores equivalentes a los dientes intactos con preparaciones MOD, paredes paralelas y cúspides reforzadas con resina compuesta.