Obtención de variedades de uva de mesa en Chile: situación actual y perspectivas
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Date
2012Abstract
La uva de mesa es sin duda uno de los principales productos agrícolas que exporta Chile. Los principales cultivares de uva de mesa que se cultivan en nuestro país han sido introducidos desde el extranjero y adaptados para la producción en nuestras condiciones. Durante los últimos 20 años se han desarrollado investigaciones para la obtención de cultivares de uva de mesa chilenos, con promisorios resultados. Este trabajo se basó en una revisión bibliográfica y entrevistas a viveristas y profesionales relacionados al tema. En él se expone la problemática de la obtención de variedades de uva de mesa propias. En la revisión bibliográfica se trató inicialmente la situación actual de la obtención de variedades en el mundo, para luego investigar acerca de lo que se ha realizado y lo que se está realizando en Chile en torno a la obtención de variedades. Además, se abordan los métodos a través de los cuales se han obtenido nuevos cultivares en fruticultura, poniendo especial énfasis en aquellos en que se han obtenido las variedades de uva de mesa actuales. Las conclusiones que se obtuvieron en el presente trabajo fueron: en Chile existen dos grandes consorcios destinados a la obtención de variedades de uva de mesa por mejoramiento genético. Estos son el Consorcio Biofrutales y el Consorcio Tecnológico de la Fruta. En Chile se han desarrollado algunos cultivares de uva de mesa que no han sido difundidos mayormente principalmente por problemas de postcosecha. Los cultivares desarrollados recientemente INIA-Grapeone y la variedad Chimenti Globe al parecer son los con mayor futuro. Existen actualmente una serie de nuevos cultivares en Chile provenientes de programas extranjeros en fase de prueba que podrían ampliar la gama de variedades posibles de producir en Chile en un futuro próximo. Es necesario desarrollar variedades propias debido a que permitirían incluir los requerimientos específicos que tiene la industria de la uva de mesa chilena, evitar el riesgo que implica introducir y adaptar variedades extranjeras a nuestras condiciones. Los nuevos cultivares extranjeros que se han desarrollado con capitales privados vienen bajo sistemas de comercialización cerrados y, por ende, no será posible para todos los productores acceder a ellas. Entre las limitaciones que se podrían presentar se encuentran el control de la variedad en manos de unos pocos productores y obligaciones de exportar sólo con algunas exportadoras, además se podrían presentar royalties altos por producción y por planta. En el futuro habrá una mayor gama de variedades, pero con un menor porcentaje de participación de cada una de éstas sobre el total de las exportaciones de uva chilenas. Las características más importantes que las variedades chilenas debiesen tener son: apirenia y muy buena postcosecha.
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